Desarrollar familiaridad con la tecnología y su poder de transformación para convivir con ella sin fricción
En esta época poco común por la pandemia de COVID-19 y sus constantes cambios en la forma en que nos comportamos y pensamos, es evidente que la transformación tecnológica acelero el camino de la innovación y redujo los tiempos para su implementación, consideró que debemos comprender esta tendencia de la tecnología, ya que se ha convertido en un factor clave en el actual ecosistema empresarial, personal y familiar, por supuesto observando las normas de la sana distancia y protección de la salud.
Sin duda, la gran mayoría de la fuerza laboral se vio en la necesidad de incrementar sus habilidades, tanto en el entorno profesional como personal y empezó a aprovechar todas las oportunidades que la tecnología pone a su disposición, desde el inicio de la pandemia.
¿Cómo evoluciono la Tecnología con la pandemia?
La presencia de la tecnología ya estaba presente en nuestras vidas de manera activa y aumentando gradualmente y una situación que debemos de observar, es que de la misma manera se incrementan nuestras capacidades como seres humanos, yo pensaría:
EL ser humano evolucionó radicalmente con la presencia de la pandemia en cuestiones relacionadas con la tecnología, el trabajo remoto, sesiones con múltiples invitados de cualquier parte del mundo, se adaptó con gran prontitud y se integró para poder seguir con las relaciones personales y de negocio, claro sin dejar de mencionar a los niños y jóvenes que también de forma rápidamente impresionante dejaron que la tecnología se incluyera más profundamente es sus vidas.
Sin duda, las revoluciones tecnológicas impulsan los desarrollos más importantes de los seres humanos, en la actualidad en la Cuarta Revolución Industrial que está cambiando la realidad que conocemos de manera radical y a mayor escala que nunca antes, este factor histórico también fue impulsado por el confinamiento y las normas de seguridad para la pandemia de COVID-19, en el sector salud, en la medicina, en las matemáticas, en la era de la información queda evidente el uso de los metadatos para la obtención de estadísticas de la pandemia, proyecciones, simulaciones y muchas forma de explotar la información y con ello ha sido posible dimensionar el curso de la misma.
Tenemos un presente en el que todo esté conectado a Internet produciendo datos y tomando decisiones autómatas, las revoluciones tecnológicas impulsan los desarrollos más importantes de los seres humanos, aun cuando a muchos de nosotros podemos sentir que la tecnología te supera, que te cuesta adaptarte a la transformación digital de tu organización o simplemente quieres obtener una comprensión holística y humana de desarrollo.
En mi carácter de especialista en tecnologías de la información, nunca antes había combinado tanto la investigación social con lo mejor de la tecnología de datos, no obstante, con los años me he esforzado en satisfacer las necesidades de información de las organizaciones donde he trabajado y así, crear el ambiente de cómputo con las mejores estrategias y planes de acción, uniendo la investigación cualitativa de la tecnología emergente.
La tecnología
Si bien, cuando mencionamos la tecnología nos referimos generalmente a la aplicación de la ciencia para el desarrollo de productos o procesos que simplifican nuestro día a día, en este momento histórico actual y desde un país desarrollado como México, es fácil que al pensar en el concepto de tecnología nuestra imaginación sea capturada rápidamente por vehículos autónomos, plataformas digitales innovadoras o avances en robótica.
Hemos construido esta imagen de la tecnología para que se ajuste a nuestro contexto cultural, social, histórico y económico, incluso sin darnos cuenta, sin duda, la tecnología es percibida y utilizada en diferentes maneras en distintos puntos del planeta.
Particularmente, no podemos hablar de un mismo uso por parte de todos los usuarios, ni de una sola visión de la tecnología, considero que sería más sensato hablar de tecnologías, en plural, para acercarnos a esa idea de diversidad existente.
Por ejemplo:
Hablamos de tecnologías industriales, robóticas, de consumo, de la información, etc., aunque podemos categorizarla de diferentes maneras, en vez de por sector, por nivel de madurez, por tipo de uso, etc. Es importante recordar que los humanos llevamos desarrollando y utilizando tecnología desde mucho antes de la creación de internet o de los inicios de la robótica.
Ahora es cuando somos más conscientes del impacto que tiene la tecnología en nuestras vidas debido a su gran desarrollo e impacto global y no se trata de un conocimiento nuevo, en mi experiencia, sé que es complicado definir y acotar el concepto de tecnología porque es un concepto dinámico y vivo, pienso que lo que entendemos por tecnología cambia según cambian nuestros contextos, demandas y necesidades.
Hoy en día nos resulta difícil pensar en la tecnología separada de lo digital, cada vez más incorporamos soluciones tecnológicas a más procesos rutinarios y cada vez más tratamos de solucionar problemas a través de la tecnología, gracias a ello nuestra resistencia a la tecnología es cada vez menor, es decir, cada vez nos cuesta menos adoptar una nueva tecnología en nuestro día a día y cada vez la diseñamos y utilizamos de manera más eficiente.
La humanidad de la tecnología
Hay perspectivas que pueden ser muy radicales, muchos expertos resaltan los efectos negativos que la tecnología digital está teniendo en nuestra salud física, mental y en otros importantes aspectos de nuestras vidas, por ejemplo, no son extraños los discursos que aseguran que la tecnología entendida como la digitalización de muchos procesos cotidianos, daña nuestras habilidades sociales, perjudica nuestra memoria o nos vuelve más lentos o incluso perezosos.
De esta manera, es común escuchar discursos que criminalizan el uso de la tecnología y reducen la importancia que esta ha adquirido en nuestras rutinas calificándola de antinatural, para ser honestos, existen muchos argumentos y ejemplos para defender que la tecnología digital ha impactado negativamente en la vida de algunas personas y comunidades, las hay también con una postura tan simplista como errónea.
No está por demás, los ejemplos sobre cómo la tecnología limita nuestras capacidades de procesar información pueden ser rápidamente contrarrestados con ejemplos sobre cómo la tecnología ha facilitado nuestro acceso a la información.
Los seres humanos creamos y desarrollamos culturas por naturaleza y parte de la cultura es la creación de lo que se denomina cultura material, todo aquello que producimos, sea físico, digital o en la nube.
¿Son los productos que creamos menos naturales que nosotros mismos?
Los seres humanos hemos demostrado ser cambiantes, diversos, estamos en constante desarrollo e incluso buscamos tensión y transformar los límites naturales que nos rodea para nuestro propio beneficio, entonces es frecuente confundir el término antinatural con el término artificial.
Es importante recordar que una parte importante del desarrollo de nuestra habilidad para comprender y aprovechar la tecnología pasa por entender que la tecnología, su desarrollo y utilización va intrínsecamente unida a la capacidad creativa y de invención del ser humano y que no puede ser separada de sus contextos de producción y adopción ni de sus significados sociales y culturales.
Las personas creamos tecnología para las personas
En general antes de que un producto tecnológico llegue a tus manos como usuario final ha pasado por un largo proceso desde la idea primaria, diseño, validación y testeo llevado a cabo por varios equipos de trabajo profesionales, consideremos que este proceso de creación puede llevarse a cabo en una sola región geográfica o en varias regiones, puede ser realizado por una sola empresa, por la colaboración entre varias empresas, por la colaboración entre empresas privadas y públicas, por la colaboración entre universidad, centros de investigación y empresas o por otras combinaciones posibles.
Para que los usuarios podamos adquirir y hacer uso de los productos desarrollados por las organizaciones debemos esperar varios meses o incluso años dependiendo de la naturaleza de los mismos, por eso no podemos olvidar que detrás de cada producto hay un equipo de personas que ha invertido tiempo, esfuerzo y dinero en su desarrollo y comercialización.
Debemos situarnos en el espacio y en el tiempo
¿Cómo lo hacemos? Preguntándonos en este caso quién produce la tecnología, por qué la produce, desde dónde se produce, con quién la produce, con cuánta inversión, durante cuánto tiempo, cuándo la produce, dónde la produce, en qué contexto político y económico.
El conocimiento es poder, la práctica y la experiencia te lleva a realizarte estas preguntas y con ello podemos tomar decisiones más conscientes, recordemos que los seres humanos siempre producimos conocimiento, productos, servicios o procesos situados y no podemos escapar de ello, un ejemplo interesante para entender mejor este concepto es el de la inteligencia artificial es decir aquellos sistemas automatizados a los que consideramos inteligentes porque pueden tomar decisiones e incluso aprender de la experiencia.
Es importante cuestionar tanto la producción de tecnología que no respeta el medio ambiente o los derechos laborales de las personas como cuestionar la supuesta objetividad de la misma, en todo ello está presente el pensamiento crítico y es siempre nuestro mejor aliado para analizar las realidades sociales.
Evidentemente con los años y la experiencia acumulada los seres humanos vamos mejorando la tecnología que producimos haciéndola más precisa, más confiable, más fácil de utilizar, más potente y más asequible, por lo que una tecnología incipiente siempre tendrá más tasas de error y tendrá menos credibilidad y tasas de confianza, en comparación de una tecnología perteneciente a un mercado maduro.
La habilidad de comprender la tecnología
Las habilidades blandas son cada vez más relevantes en el mundo empresarial y son más buscadas por los departamentos de recursos humanos, tanto a la hora de decidir entre varios candidatos con habilidades duras similares, como a la hora de promocionar internamente las carreras profesionales, lo que marca la diferencia son las habilidades blandas.
Definitivamente las habilidades blandas están relacionadas con la madurez emocional de los individuos y con el grado de comodidad que experimentan en situaciones sociales diversas, debe ser una persona empática que sabe comunicar de manera asertiva, que sabe trabajar en equipo, escuchar activamente y resolver problemas, evidentemente se convierte en una persona de un alto valor para las empresas independientemente del tipo de profesional que sea o de los conocimientos técnicos que posea, por esta razón te animo a que desarrolles una nueva habilidad que cada vez es más demandada en un mundo empresarial que está atravesando por la transformación digital y es la habilidad de comprender y aprovechar la tecnología.
¿A cuántas personas conoces que les abruma utilizar equipo de cómputo?
¿Cuántas personas se agobian cuando tienen que realizar una tarea a través de un medio digital?
En muchas ocasiones la responsabilidad no es de la persona que se siente sobrepasada sino de los equipos de diseño que no han creado una buena experiencia de usuario o una buena interfaz, fácil de utilizar, intuitiva y que te ayude en vez de limitarte, no obstante, en otras ocasiones a pesar del buen o mal diseño, las personas sin esta habilidad blanda suelen sentirse amenazadas, tensionadas y agobiadas por lo tecnológico.
Les cuesta entender la tecnología, necesitan ayuda para adoptarla y su curva de aprendizaje es más larga que la de la media y, por lo tanto, son personas rezagadas con lo tecnológico y suelen adoptar la tecnología en sus vidas privadas o profesionales cuando ya no hay más remedio, cuando el mercado es muy maduro, intentando así huir de lo inevitable.
La curva de adopción de la innovación de los avances tecnológicos que afectan directamente a nuestras vidas personales y profesionales están aquí para quedarse y cada vez vienen con más fuerza, por menos dinero y con más diversidad de opciones para adaptarse a todos los públicos, de tal manera, es importante entender que hoy en día muchas organizaciones están pasando por un proceso de transformación digital lo que quiere decir que probablemente te toque vivir ese proceso, no le rehúyas, recuerda que lo que se transforma son las personas, sus prácticas, hábitos y formas de trabajar y lo que se digitaliza son los procesos como parte de esa nueva cultura empresarial.
Para sobrepasar la barrera mental y emocional hacia la tecnología y estar preparado para el cambio debes de pasar por un proceso de transformación que lleva algo de tiempo y requiere de tu esfuerzo, de eso no hay como esconderse o evadirlo, gradualmente debes adquirir la habilidad blanda que sea inclusiva con la tecnología.
La diferencia es que no sabemos muy bien a quién acudir o qué hacer cuando detectamos que nos cuesta trabajar en equipo, hablar en público, mostrar empatía o practicar la inteligencia emocional, esa es una realidad que no queremos ver, consideremos que los sistemas educativos ofrecen tradicionalmente habilidades duras de manera activa en el aula y las habilidades blandas quedan relegadas a un segundo plano, se aprenden de la forma directa, las aprendemos en el patio, en los pasillos, interaccionando con los demás, intuyendo cómo deberíamos comportarnos, aprendiendo de nuestros errores o persiguiendo anhelos personales.
Suele decirse que las habilidades blandas no pueden aprenderse, que son habilidades que o tienes o no tienes, nada más lejos de la realidad, sin embargo, las personas tenemos la capacidad de aprender, cambiar y transformarnos, consideró que, si te lo propones, puedes hacer que cualquier inclusión que pase a formar parte de tu repertorio de habilidades sociales, emocionales o profesionales.
Saludos,
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